Noticias
en Línea. El papa Francisco fue denunciado ante el Quinto Juzgado Civil de
Chiclayo por siete ex sacerdotes de la Iglesia Católica de Lambayeque quienes
le exigen el pago de S/. 20 millones por daños y perjuicios.
El
caso se remonta a 1999, cuando los religiosos Roberto Villanueva Rodríguez,
Jorge Albañil Rico, Andrés Talledo Fiestas, Carlos Barrientos Aquino, Wilmar
Placencia Moro, José Rabines Azcarate y Antonio Coronado Sandoval, renunciaron
porque no les permitían casarse.
Ese
mismo año formaron la Asociación Civil Religiosa Renaciendo Firme y Feliz en
Unión con Jesucristo y se unieron a la Iglesia Católica Apostólica Nuestra
Señora de Guadalupe.
Los
religiosos oficiaban misas y bautizos en las calles, lo que fue criticado por
los representantes de la Iglesia Católica en nuestro país.
Por
ello, en 2004, el Obispado Católico Romano de Chiclayo interpuso una denuncia
penal contra los excuras por los delitos de falsedad genérica, estafa y
asociación ilícita para delinquir en agravio de la sociedad, del Estado y de la
Iglesia Católica.
Pedían
dos años de prisión para ellos y una reparación civil a favor de la iglesia, de
la sociedad y del Estado. Sin embargo, cinco años después, la Primera Sala
Penal los absolvió.
Por ello, Roberto Villanueva, en representación de sus seis colegas, el 18 de
julio de 2013 demandó (expediente N° 2615 -2013) al máximo representante de la
Iglesia Católica por daños y perjuicios, y exige el pago de S/. 20 millones.
La
medida incluye a Juan Luis Cipriani, arzobispo de Lima; monseñor Jesús Moliné
Labarta, obispo de la Iglesia Católica de Chiclayo; y a Salvador García
Calderón, presidente de la Conferencia Episcopal Peruana.
En
la demanda, Villanueva señala que han sufrido persecución política de parte de
las autoridades religiosas de Chiclayo por pertenecer a otro movimiento
religioso y por ser casados. Agrega que les han dicho que son falsos sacerdotes
y califican a su organización como una secta.
No hay comentarios:
Publicar un comentario