Un
grupo de unos 400 manifestantes que marchaba por la céntrica Avenida Paulista,
en el corazón financiero de Sao
Paulo, destruyó más de diez sucursales bancarias y algunas tiendas
comerciales, informaron este viernes las autoridades.
La policía militarizada indicó que una centena de encapuchados, infiltrados entre
los cerca de 400 manifestantes, destruyó con palos y piedras varios locales
comerciales de la famosa avenida, principalmente teniendo como blanco los
locales de los bancos privados Itaú y Bradesco.
"Los
policías que estaban cerca vieron los actos de vandalismo, pero no
intervinieron porque eran minoría frente a los vándalos y tampoco querían
cometer una represión injusta con las personas que protestaban
pacíficamente", declaró uno de los investigadores de la aseguradora
bancaria que pidió no ser identificado.
Algunos
manifestantes prendieron fuego en recipientes de basura y escribieron sus
reivindicaciones en las paredes de los edificios y locales.
La
policía tuvo que cerrar el tránsito en las avenidas Paulista y 23 e Maio, una
de las principales arterias de la ciudad y que comunica el centro de la
metrópoli con el aeropuerto de Congonhas.
Brasil
está celebrando esta semana la Jornada Mundial de la Juventud, un
encuentro con el papa Francisco, en la que el pontífice ha mostrado su
simpatía hacia las reivindicaciones de los jóvenes brasileños.
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