El grupo islamista Hamas había anunciado
"sorpresas" en respuesta al ataque israelí que mató el pasado
miércoles al jefe del brazo armado, Ahmed Jabari, en lo
que fue el inicio de la ofensiva 'Pilar Defensivo' en la Franja de Gaza.
Pues ha cumplido. Primero con disparos a
la estratégica y céntrica zona de
Tel Aviv. Y después, este viernes y en una medida sin
precedentes, ha apuntado a Jerusalén.
A primera
hora de la tarde, los medios anunciaban que las sirenas antiaéreas se habían activado en varias
poblaciones y barrios de la ciudad tres veces santa. Numerosos habitantes
llamaron confirmando la 'veracidad' de las sirenas y el estruendo de
explosiones. Las autoridades israelíes detectaron la caída de un misil que no ha provocado
víctimas o daños materiales.
Poco
después, el brazo armado de Hamas asumía la autoría del ataque afirmando que se
trataba de un cohete Qasam M76.
Una vez que
las milicias han alcanzado Tel Aviv y Jerusalén, los analistas locales
consideran que es la puerta a una ofensiva aérea de Israel
aún mayor en Gaza y en pocos días también
terrestre.
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