Noticiasen Línea. Después de descuartizar la Reforma del Transporte, borrar
murales y bajarle el dedo al proyecto Río Verde, esta vez el alcalde de Lima,
Luis Castañeda Lossio, se ensañó con la concesión del teleférico –iniciativa de
su predecesora Susana Villarán– y la dejó sin efecto. ¿El motivo?
Incumplimiento de la garantía de 600 mil dólares. Sin embargo, el gerente
general de Operadora de Teleféricos, Esteban Moscoso, desbarató el argumento y
aseguró que han iniciado un proceso de arbitraje.
Con
esta decisión de la gestión edil, se perjudicó a 400 mil personas que iban a
viajar en el teleférico que iba a unir el Parque de la Muralla y el cerro San
Cristóbal. Este proyecto fue presentado hace siete años y la inversión estimada
fue de 9 millones de dólares. Además, se contaba con capitales canadienses.
Hagamos
un recorrido. El 22 de enero se le notificó a la empresa Operadora de
Teleféricos, a través de la resolución 02-2015-MML-GPIP, que el proyecto no iba
más por no cancelar una garantía que figuraba en el contrato.
No
obstante, el gerente general de Operadora de Teleféricos, Esteban Moscoso,
afirmó que sí cumplieron con lo estipulado en el contrato. Asimismo, precisó
que a vísperas del inicio de la obra se les notificó algunas observaciones.
“El
25 de setiembre de 2014 nos enviaron una carta indicándonos que el estudio
técnico del teleférico estaba aprobado, pero que antes teníamos que resolver
ciertas observaciones para que tenga efecto”, recordó Moscoso, quien recalcó
que la Municipalidad de Lima nunca les respondió cuando ellos le comunicaron
que habían subsanado las deficiencias.
De
otro lado, el empresario afirmó que si la comuna les hubiera
informado que se habían levantado las observaciones, habrían pagado la garantía
de 600 mil dólares. Es por ello que anunció que han iniciado un proceso de
arbitraje por casi seis millones de soles contra la Municipalidad de Lima.
Con
sangre en el ojo, la Municipalidad de Lima cerró por 30 días el Parque de la
Muralla, que, coincidentemente, es administrada por la empresa Operadora de
Teleféricos. Según Castañeda, la medida fue porque “estaba desecho y
descuidado”.
NEL/Correo
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