El expresidente Alberto Fujimori, recluido en la sede de la Diroes por una condena de
25 años por crímenes de lesa humanidad, envió
una nueva carta en
la que lamenta que no le permitan ser entrevistado –como él mismo pidió– y da detalles de
su encierro.
La misiva, enviada
a Radioprogramas del Perú, lleva como título “Memorias
desde mi encierro (1)”, lo
que indica que será la primera de una serie de comunicaciones que tiene
previsto publicar el exmandatario, quien está a la espera de una respuesta a su
pedido de indulto humanitario.
El comunicado lleva, además, un dibujo hecho
por el propio Fujimori en
la que se ve la silueta de un hombre junto a dos niñas sobre una nube,
presumiblemente él y sus nietas.
La carta completa dice lo siguiente:
Permanezco aquí ya cinco años. Con el tiempo tengo la sensación de
que este lugar se achica cada vez más.
Este es un encierro que siento más opresor al descubrir que no
puedo comunicarme con el mundo exterior y hablar sobre mi situación y este
centro de reclusión.
Estoy encerrado y, además del cáncer a la lengua, ahora llevo un
parche en la boca. Estoy impedido de hablar, de expresarme.
No tengo derecho a defenderme a mí mismo, contar mi verdad a un
medio serio y objetivo. Estoy condenado a la prisión y ahora también al silencio.
Pero no me rindo. Voy a insistir y, mientras, escribiré y
expresaré en silencio las memorias desde mi encierro.
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