Desprotegida. Acudió tres veces al Centro de Emergencia Mujer para
denunciar los constantes maltratos físicos a los que era sometida por su
esposo, pero nadie escuchó sus gritos. María Cenaida Frías Frías (22) fue
degollada por su pareja en Ventanilla. Luego, el homicida envenenó a su hijo de
2 años e intentó suicidarse.
Eran las 7:00 de la mañana
de ayer cuando María Frías llegó a su casa luego de trabajar en una fábrica de
conservas, en el turno de madrugada. Recogió a su pequeño hijo, quien había
quedado al cuidado de su vecina.
Se dirigieron a su
vivienda, en la manzana R, lote 23, en el asentamiento humano Carlos García
Romero, en la zona de Pachacútec.
Al ingresar a su inmueble se encontró con Daybet Flores Inga (25),
de quien estaba separada hacía más de un mes. Este la acusó de una supuesta
infidelidad, lo que originó una airada discusión, según contaron los vecinos.
De pronto, el desalmado hombre subió el volumen de su equipo de
sonido para que los vecinos no escucharan los gritos de auxilio de la víctima.
En ese momento la
degolló con un cuchillo y, luego, envenenó a su hijo, quien sobrevivió. También
intentó quitarse la vida con la misma sustancia tóxica. Los vecinos, alarmados,
irrumpieron en la casa y se encontraron con la macabra escena.
María Frías denunció los
maltratos físicos en la Demuna
de Ventanilla en octubre pasado. De inmediato, su caso fue derivado al Centro
de Emergencia Mujer, donde recibía atención psicológica.
Mientras esto
ocurría, Daybet Flores la acosaba constantemente. Llegaba a la vivienda con el
pretexto de visitar a su hijo e, incluso, algunas veces se quedaba a dormir,
contaron los vecinos.
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