El Perú no está preparado para enfrentar
las consecuencias de un eventual atentado terrorista al gasoducto de Camisea,
que afectaría el 50% del abastecimiento eléctrico del país, dijo el
especialista en derecho energético Anthony Laub.
Se refirió así al ser consultado sobre el
ataque perpetrado el último viernes contra el aeródromo de Kiteni, en Cusco,
donde las huestes de Sendero Luminoso incendiaron tres helicópteros que
prestaban servicios al proyecto Camisea.
“Casi el 50% de lo que estamos consumiendo hoy día
el 80% de los peruanos que estamos interconectados proviene del gas de Camisea
(…) Si es que el gasoducto de Camisea
fuese sujeto de un atentado y eso supone que salga de operaciones, por lo menos
la mitad del país se vería perjudicado con racionamientos de energía eléctrica”, indicó Laub a
RPP Noticias.
Al referirse al proyecto de Ley que Afianza la Seguridad Energética ,
presentado en agosto por el Poder Ejecutivo para hacer frente a eventuales
emergencias en el sector energético, el experto criticó que “las normas no
sirven de nada si no tienen la infraestructura suficiente que te dé el
respaldo”.
Laub señaló que si el gasoducto de Camisea deja de
operar, se necesitaría tener una reserva del 50% de generación eléctrica para
poder suplir todas las necesidades energéticas del país sin que nadie se vea
afectado. “Hoy
día no llegamos al más del 6% (de reservas)”, dijo.
A su turno, el exministro de Energía y Minas Pedro Sánchez cuestionó que el proyecto de seguridad energética
que planteó el Gobierno demoraría demasiado en implementarse.
“Hacer la licitación de estos proyectos por lo
menos va a tomarle un año a este gobierno. El hacer los Estudios de Impacto
Ambiental puede tomar otros dos años y la construcción no menos de tres.
En
consecuencia estos proyectos tomarían muchísimo tiempo”, expresó.
Sánchez planteó un proyecto alternativo de la
instalación de una planta de regasificación del gas licuado de petróleo (LNG) que nos daría unas
dos semanas de abastecimiento de respaldo, en caso el gasoducto de
Camisea se vea afectado por un atentado o un desastre natural.
“Existe un proyecto que incorporamos en el decreto
de urgencia 01 y 02 del año pasado que consiste en darle seguridad al sistema
mediante la instalación de una planta de regasificación de LNG en la planta de
Melchorita. Ese es un proyecto que podría realizarse en un plazo mucho
más corto (…) y que puede llevarse a cabo de manera muy expeditiva”, refirió.
El exministro aseguró que los proyectos de reserva
fría de electricidad que están en construcción en Ilo y Piura, que culminarían
el próximo año, atenuarían cualquier
inconveniente que pueda presentarse con el abastecimiento del gas de Camisea, usado para
generar la mitad de la electricidad del país.
Fuente:
Noticias en Línea - RPP
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